Lo siento, no he sido seducida por el lado oscuro de la fuerza , ni me ha capturado ningún cazarrecompensas para congelarme en carbonita. Tras solucionar algunos problemas con blogger, mi ordenador y mis midiclorianos siento que la fuerza vuelve a fluir en mi interior. Lástima que sufra una variante no descrita del síndrome post-vacacional que me permite procesar pensamientos a gran velocidad pero que me impide transformarlos en un texto con cierta lógica e inteligibilidad. Quizás cuando se encuentre una cura pueda volver a darle un cierto grado de continuidad a esto. Mientras tanto...sigo mirando al cielo.
Y el que crea que no existen los midiclorianos...que lea esto
